Cuando rescaté al pequeño Leopoldo Benito Desmond, nunca imaginé que sería un gato de semejante dimensión (y eso que aún no tiene un año...) Si sigue creciendo a este ritmo, pronto deberé planificar una expansión de la casa. Hasta voy a tener que comprar otra caja transportadora porque en la que tengo creo que ya ni entra.


6 comentarios:
¡Qué gatazo! No, yo tampoco me imaginé, ¡era tan chiquito!
Besos.
Si, Mariela, era raquítico el pobre. Le habrá quedado algún trauma y morfa como loco. Pobre Dulcinea, come lo que le deja.
Besos
esa foto es genial...es casi el logo de puma
sisi, un puma algo excedido y con actitud poco atletica...Puede estar horas así reposando, jee
jajajjaja qué grande Leopoldo! la pasa mal, eh!!
manu: Leo lleva una vida muy estresada, aunque no lo parezca...
Publicar un comentario