1 de mayo de 2009

TEMPO


De tanto en tanto me pasa. Tengo más cosas que hacer que tiempo disponible para ello. O al menos es la sensación. Cuello de botella, le dicen. Organizo todo lo que tengo que resolver y me canso de solo pensarlo (al mejor estilo del Linyera de Diógenes)

Me acelero tanto que me cuesta dormir. Luego, duermo mal. Luego, me levanto más cansada. Luego…

Pero tuve la fortuna, por llamarlo de alguna manera, de hablar con algunos amigos que hacía unos días que no veía, y también estaban cansados. “¿No me digas? ¿Qué te anda pasando?”, pregunté, inocente. La respuesta que recibí fue un huracán de situaciones caóticas y problemas dantescos, que me hicieron sentir tal como si me dieran la más dulce panacea. También me topé con personas atravesando, estóicamente, graves dificultades.

Me arrepiento de haberme quejado del cansancio, que no deja de ser una bendición. Resigno mis cosas en mente y me permito compartir con ellos sus momentos críticos. Ya no importa si duermo menos pues duermo mejor! Ya no me siento cansada; ahora, paradíjicamente, siento tranquilidad.

Recuerdo a la Madre Teresa, quien dice en una oración para aprender a amar:

“(…) Cuando no tenga tiempo, dame alguien que necesite mis minutos.
Cuando esté desanimado, dame alguien para darle nuevos ánimos.
Cuando piense en mí mismo, vuelve mi atención hacia otra persona. (…)”

10 comentarios:

Blus dijo...

Tal cual, siempre aparece alguno que está peor que nosotros y te ponés a pensar "por esta boludez me preocupaba yo?".

Igual en mi caso pasan 5 minutos y me olvido :P

Saludos!!

Erica dijo...

jejee, Blus, me extraña, señor! Cómo que se olvida? Bueh, sí, a veces pasa que uno vuelve a las puteadas al instante!

Besos!

Mariela Torres dijo...

Es verdad eso, a veces nos preocupamos tanto por cosas que no son nada al lado de verdaderas tragedias.

Besos.

Erica dijo...

Mariela: si, lo importante es darse cuenta a tiempo y revertir la actitud.
Besos!

María dijo...

Siempre hay gente que esta peor que nosotros. Pero ojo, a no descuidar el cansancio y no pasarse de rosca. Lo digo por experiencia, pues desde hace un año que estoy pagando las consecuencias del stress.

Un beso.

Anónimo dijo...

Pero que post!
Ahora me entro la culpa!
Cuanta verdad, yo tb. me quejo de mi cansancio, de mi falta de sueño de mi sueño y cuando salgo de ronda y escucho a mi gente, me quiero matar, asi que enseguidita me prohibo la queja y la gratitud infinita sale de mis pensamientos.
beso enorme
India

Erica dijo...

María: tenés razón,hay que permitirse el descanso sino, estamos fritos!!

India!! Cómo estás? Jeje, vos siempre vas a mil por hora!! Si nos detenemos a observar a nuestro alrededor, la cosa cambia. O al menos, debería.

Besos!!!

manu dijo...

la vida tiene estas cosas raras...digamos...uno termina por sentirse mejor al escuchar problemas ajenos...es raro...pero es cierto.

de ahí que hay gente que anda sin problemas y no quiere escucharlos de nadie. mundo burbuja le llaman.

supongo que a muchos nos pasa lo que te pasa a vos.....pero te digo una cosa..falta menos para el finde!! ejejej

un besote!

Erica dijo...

Manu: bueno, no es que uno se sienta mejor por saber que alguien está peor. sino que a veces percibir esas realidades nos permite salir del llamado "mundo burbuja". Y a partir de ese momento, permitirnos ser más agradecidos, más compasivos, más empáticos, más...Y menos egoístas, menos soberbios, menos irritables, menos...

Gracias por pasar. besos!

PR. dijo...

QUIEN SERA ESE AMIGO ???
MMMMMMM ....

EN QUE ANDAMIO ???

BESOS !!!